No pudo ser. El Vélez Club de Fútbol tuvo en su mano la victoria ante el Motril en el Escribano Castilla. Pero los locales aprovecharon varios despistes de los de Tello en la recta final del partido para acabar dejando los tres puntos en casa.
Durante toda la semana se habló mucho del clásico del grupo IX de Tercera División. En Vélez conocían de sobra Motril y lo que supone jugar en su estadio, siendo conscientes de la dificultad que entraña el hecho de ganar allí.
El partido arrancaba con las espadas en todo lo alto, siendo los locales quienes golpeaban en primera instancia por medio de Vela, que adelantaba a los suyos en el minuto ‘4 de partido.
El gol rompería los esquemas de ambos técnicos, siendo el Vélez quien diera un paso adelante para buscar el empate. Que llegó. Lo hizo en el 39′ gracias a Ebwelle, que mandaba el partido al descanso con la igualdad en el marcador.
En la reanudación, los axárquicos estaban más por la labor, gozando de ocasiones y haciendo de Cuenca un héroe en el Escribano Castilla. Y dieron el golpe. En el ’62, Nacho iba a dar la sorpresa adelantando a un Vélez que se vio ganador en tierras granadinas. Pero nada más lejos de la realidad.
Porque es máxima del fútbol que ‘hasta el rabo, todo es toro’; así fue. Los locales buscaron con intención la remontada y la consiguío gracias a los goles de Vela (’85) y Eric (’86), dejando sin premio a los veleños.
Una jornada que pudo ser propicia y que se terminó escapando. Ahora, toca de nuevo trabajar para recibir el próximo fin de semana al Centro de Deportes El Palo.
