
El fin de semana deja en Granada numerosas imágenes de aglomeraciones de jóvenes de botellón disfrutando de la fiesta cantando sin mascarilla ni distancia de seguridad en pleno pico de la pandemia. La Policía Local ha tenido que realizar 120 intervenciones en una sola noche con más de 350 llamadas, teniendo incluso que desalojar una discoteca y un pub.