Agentes de la Policía Nacional han detenido en Málaga a dos varones, de 41 y 47 años, como presuntos responsables de los delitos de robo con fuerza de vehículo y receptación. Los investigados fueron arrestados cuando acababan de extraer el motor a una furgoneta -previamente sustraída- y se disponían a introducirlo en una empresa. Gracias a la colaboración del propietario del automóvil robado y al sistema de localización que llevaba instalado fue posible su localización. Los agentes descubrieron que el establecimiento que iba a comprar el motor albergaba, al menos, otros siete motores, expuestos y a la venta, pertenecientes a otros tantos vehículos sustraídos. Finalmente, fueron recuperados ocho motores y una furgoneta -que presentaba además el paragolpes arrancado-.
Esta investigación se inició a raíz de la denuncia efectuada por el propietario de una furgoneta. En la misma manifestaba que le habían sustraído su automóvil que se hallaba estacionado en las inmediaciones de su domicilio. De la misma forma, informaba que el coche tenía instalado un dispositivo de localización, facilitando las coordenadas del lugar donde podría hallarse.
Sorprendidos in fraganti mientras transportaban el motor
En primer lugar, una dotación policial uniformada acudió rápidamente al lugar indicado por el denunciante donde localizaron el vehículo y a dos personas, que de forma apresurada, portaban el motor del coche y se introducían con él en un establecimiento próximo.
Los agentes dieron el alto policial y, tras identificar a ambos, resultaron arrestados como presuntos responsables de un delito de robo de vehículo. Tras comprobar que, el lugar donde se introducían estas dos personas era una empresa dedicada a la compraventa de motores de automóviles dieron cuenta al grupo especializado en tráfico ilícito de vehículos, que continuó con la investigación hasta la puesta a disposición judicial de los arrestados.
La averiguaciones practicadas tras una primera inspección en el local evidenciaron que, en el establecimiento estarían expuestos hasta siete motores más pertenecientes a vehículos que habían sido denunciados como sustraídos.
Este operativo culminó con la detención de dos personas, supuestamente dedicadas a robar vehículos, desmontar los motores y venderlos.
La investigación continúa abierta a fin de analizar y averiguar la lícita procedencia de los motores expuestos a la venta, así como a localizar a las víctimas de los motores finalmente intervenidos y que figuran en las bases de datos policiales como sustraídos.