El presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, ha incidido hoy, durante la celebración del Día de Málaga, en que la gestión del agua y la movilidad son los retos y los desafíos más urgentes para afrontar el crecimiento de la provincia. En el acto, que se ha celebrado en Alhaurín de la Torre, se ha entregado la Medalla de Oro de la Provincia a Emilio Alba, Vanesa Martín, Alberto Díaz, Prolongo y al Real Club Mediterráneo.
Además de los miembros de la corporación provincial, la gala de entrega de las medallas ha contado con la presencia del alcalde de Alhaurín de la Torre, Joaquín Villanova; el subdelegado del Gobierno de España, Francisco Javier Salas; y la delegada del Gobierno de la Junta de Andalucía en Málaga, Patricia Navarro. También han asistido alcaldes y representantes municipales de diversas localidades.
En su intervención, Francisco Salado ha señalado que la provincia necesita inversiones urgentes y no sólo ni principalmente en carreteras, sino en trenes. “El Cercanías -ha añadido- debe llegar a Alhaurín de la Torre, al Parque Tecnológico y a Cártama. Y desde luego a Antequera ahora que está la infraestructrura. Y, por supuesto, ampliarse en la costa. Es incomprensible e injusto que la Costa del Sol no disponga de conexión ferroviaria hasta Marbella y Estepona. Y resulta igual de absurdo que no se esté estudiando ya la llegada del tren a la Axarquía”.
Al respecto, ha insistido en que habría que aprovechar los fondos europeos para invertir en infraestructuras de transporte público sostenible, porque reducirían drásticamente la huella de carbono, quitarían miles de coches de nuestras carreteras, supondrían un ahorro económico en costes de transporte y mejorarían notablemente la calidad de vida de los malagueños.
En cuanto a la gestión del agua, Salado ha apuntado la necesidad de llevar a cabo las grandes obras pendientes, como trasvases entre cuencas deficitarias y cuencas excedentarias, ampliación de pantanos, mejoras de las canalizaciones, “y aprovechar hasta la última gota de agua, como está haciendo la Junta llevando el agua depurada a los regantes de la Axarquía”.
En esta línea, ha recordado que desde la Diputación se está luchando por mejorar el aprovechamiento de los recursos hídricos, alertando sobre las fugas de agua que se producen en las redes municipales e inyectando a los ayuntamientos este año 18 millones de euros para obras hidráulicas y mejoras en el abastecimiento de agua.
Así mismo, ha precisado que no se puede tirar por la borda, por falta de inversiones, todo lo que se ha avanzado en el sector agroalimentario, del que dependen miles de familias y la mayoría de pueblos pequeños.
“Málaga -ha aseverado- no sólo es turismo y tecnología. También somos una potencia agroalimentaria, con los subtropicales, con el aceite, con la industria cárnica. Es un sector que genera mucho empleo y riqueza pero que está sufriendo mucho con la sequía. Y hay que ayudarles, no atacarles como se hace desde algunas instancias. La Diputación rechaza frontalmente cualquier intento de criminalización y los ataques y bulos que se están produciendo contra quienes ponen comida en nuestra mesa, contra quienes llenan de productos de primera necesidad nuestros mercados. Pedimos, exigimos, respeto para ellos”.
Referente de sostenibilidad
Por otro lado, el presidente de la Diputación ha recalcado que Málaga quiere seguir creciendo y tirando del carro del desarrollo económico, social y cultural de Andalucía y de España. “Queremos ser un referente en sostenibilidad, y por ello la candidatura de Málaga a la Expo Internacional de 2027 cuenta con todo nuestro apoyo. Si lo logramos, tendremos que trabajar con mayor intensidad para resolver los proyectos pendientes y aprovechar la oportunidad de mostrar a todo el mundo nuestra provincia, sus avances, sus sueños y su mayor patrimonio: el carácter de los malagueños”, ha indicado.
Y ha asegurado que la comarca del Valle del Guadalhorce, como ya lo fue con el Caminito del Rey, será protagonista de uno de los grandes proyectos de la Diputación: el Corredor Verde del Guadalhorce.
“Vamos a crear, todos juntos, con los ayuntamientos, la Junta y espero que el Gobierno central, el mayor parque fluvial de España y posiblemente de Europa. Estamos ya uniendo con senderos, caminos y parques los 54 kilómetros que separan la desembocadura del río hasta el Chorro. Y será un equipamiento público de primer nivel, un nuevo atractivo ambiental, turístico y deportivo de nuestra provincia”, ha explicado.