La secretaria general del PP de Málaga y parlamentaria andaluza, Patricia Navarro, ha pedido hoy a la Junta de Andalucía que “convierta a los agricultores en su principal aliado contra la sequía”, reprochándole que “mantenga a muchos al margen de la legalidad y sin constituir como comunidades de regantes por las trabas administrativas requeridas, lo que les impide acceder a las ayudas para la modernización de los sistemas de riego”.
Así lo ha expuesto tras su participación en la Comisión de Medio Ambiente en el marco del Parlamento andaluz, destacando que “hace falta agilizar los trámites administrativos que dependen de esta Consejería y que actualmente suponen una verdadera rémora para el progreso del sector en nuestra tierra”, advirtiendo de que “los agricultores requieren más asistencia, al tiempo que deben impulsarse medidas para la concienciación y que no haya regantes al margen de la ley, sin estar constituidos como comunidad de regantes”.
De este modo, ha instado al Gobierno andaluz a “ponerse del lado de los agricultores y dejar de darles la espalda para favorecer el uso eficiente y sostenible de los recursos hídricos, cada vez más escasos en nuestra comunidad y, en concreto, en la zona hidrográfica de Andalucía oriental”.
Navarro ha señalado entonces que “este hecho es importante en las ocho provincias andaluzas”, si bien ha alertado de que “un estudio de la Diputación Provincial de Málaga revela que en torno a un 30% del agua de consumo se pierde en la red de abastecimiento y riego de la provincia”.
En este sentido, ha resaltado que “el sector agrícola es uno de los grandes consumidores de agua, lo que hace aún más urgente el impulso de medidas que permitan su uso eficiente para regadío”, apuntando que “la propia ley establece la necesidad de formar parte de una comunidad de regantes para solicitar la concesión de agua y para acceder a las ayudas para la modernización de los sistemas de riego”.
“El problema es que en este tema, como en muchos otros, la Administración andaluza funciona al revés”, ha manifestado, incidiendo en que “hace poco tiempo cortaban el agua a una comunidad de regantes de la Axarquía, la mayoría en trámite de regularización, mientras que en otra zona daban agua a agricultores que ni están constituidos ni lo quieren estar”.
Al respecto, ha lamentado que “se trata de 3.000 a 4.000 hectáreas que no quieren formar parte de una comunidad de regantes pero que siguen regando y, si hablas con ambos, tanto éstos como los que quieren estar pero no logran constituirse, coinciden en las mil y una trabas burocráticas que eternizan el proceso para este tipo de expediente, que es básico para poder usar el agua de forma regulada”, ha insistido.
Además, ha continuado, “también es un requisito indispensable para acceder a las ayudas para la modernización de los sistemas de regadío, habiéndose resuelto ahora una convocatoria de 2017, por lo que éstas llegan tarde y mal”, ha afirmado, cuestionando “cuántos agricultores se habrán quedado fuera por no tener actualizada la documentación o no estar constituidos como comunidad de regantes pese a haberlo solicitado reiteradamente, perdiendo la oportunidad de optimizar los recursos”.
“El agua es el verdadero oro líquido en la actualidad”, ha apostillado, “ya que ha llovido pero no lo suficiente y así lo revela el estado de los embalses, por lo que garantizar el consumo y el riego para nuestro sector agrario debe mantenerse como una prioridad para la administración competente”, ha concluido.