Agentes de la Policía Nacional, en el marco de la operación “Tocino” desarrollada contra el tráfico de drogas a gran escala, han desarticulado un grupo criminal dedicado al tráfico internacional de hachís con la detención en Málaga de sus seis integrantes. La operación ha culminado con la incautación de 640 kilogramos de hachís y la intervención, entre otros efectos, de una envasadora al vacío y diverso material para el empaquetado y envasado de la droga.
Origen de la investigación
A finales del año pasado se inició la investigación “Tocino” sobre un individuo de nacionalidad española que se estaría dedicando a introducir grandes cantidades de hachís en España procedente de Marruecos y con destino países de la Unión Europea para su comercialización en el mercado negro.
Distribución de tareas delictivas entre los integrantes: planificación envíos
Tras las primeras vigilancias sobre el investigado, los investigadores averiguaron que contaba con un consorte de nacionalidad marroquí –detenido en el año 2012 por tráfico de drogas – que viajaba asiduamente a su país de origen. La finalidad de estos viajes era la de preparar envíos de hachís desde el país africano hasta la Península. Igualmente, los agentes consiguieron identificar a otro de los integrantes, este de nacionalidad española, que sería la persona encargada de organizar el transporte del estupefaciente.
Sofisticada infraestructura para organizar el envío de la droga
Fruto de las indagaciones, los agentes comprobaron que el grupo había recibido una furgoneta procedente de Bélgica y que por sus características resultaría ideal para el transporte del estupefaciente.
Continuando con las pesquisas, los investigadores constataron que la red disponía de una nave industrial en el polígono industrial Villa Rosa de Málaga y que esta no registraba actividad comercial alguna. El local, que permanecía la práctica totalidad del tiempo cerrado, podría tratarse del lugar utilizado por el grupo para la preparación y almacenaje del hachís.
Los agentes averiguaron que tras el regreso de uno de los investigados de Marruecos, la organización puso en marcha la operación dirigida a recoger una partida de hachís en la provincia de Cádiz, lugar al que había llegado procedente de Marruecos.
Días más tarde, cuando partió, de Fuengirola con destino a la costa gaditana, una caravana compuesta por cinco vehículos de la red –entre ellos la furgoneta belga-, que al llegar al lugar, y tras adoptar numerosas medidas de seguridad, entregaron la furgoneta a otras personas –vecinas del lugar- que serían –bajo importantes medidas de seguridad- las encargadas de cargarla con el estupefaciente y devolverla, terminada la operación, a los principales investigados. Seguidamente todos los vehículos abandonaron la zona, volviendo hasta la nave en el polígono Villa Rosa de Málaga.
Detenidos con 640 kilos de hachís
Allí, fueron interceptados por los agentes de la Policía Nacional que se incautaron de 20 fardos con un peso bruto de 640 kilos de hachís. Además intervinieron una envasadora al vacío y diverso material para el empaquetado y envasado de la droga. Así mismo, detuvieron a todos los participantes, aunque ante la presencia policial, alguno de ellos trató de huir sin éxito. Fueron arrestados seis hombres –tres de nacionalidad española y tres, marroquí- de edades comprendidas entre los 58 y 45 años por su presunta implicación en un delito de tráfico de drogas y pertenencia a grupo criminal. A uno de ellos, el principal cabecilla, se le atribuye también un delito de falsedad documental, después de que se le hallara –durante la diligencia de entrada y registro en su domicilio- una carta de identidad francesa falsificada.