La Generalitat ha decidido aplazar la celebración de las Fallas de Valencia y las fiestas de la Magdalena de Castellón a causa de la crisis del coronavirus. Una determinación que finalmente no ha sido a medio camino, sino que se ha optado por la suspensión absoluta de todos los actos festivos hasta que se determine una nueva fecha, que algunas fuentes barajan que podría ser junio.
El president ha señalado que “la responsabilidad es nuestra obligación, y más cuando se está en riesgo la salud pública”. Por ello ha señalado que “hemos acorado siguiendo la instrucción aplazar la celebración de las fallas y la magdalena”. Decisión que se ha adoptado, ha añadido, por las recomendaciones del Ministerio de Sanidad. “En estos momentos de lo que se trata es de minimizar los elementos de riesgo como las aglomeraciones humanas de personas procedentes de personas de otros lugares más afectados”.