Los Villares, Maracena y la pausa del Español de Alquián. Ese es el primero de los objetivos para un Vélez que necesita abonarse a la cofradía de las victorias para no perder el tren del ascenso. Tres jornadas donde tiene que sumar nueve puntos. Ya lleva seis, por lo que la última final será en siete días, en Maracena, donde la obligación manda a llevar los tres puntos al Vivar Téllez.
En lo que respecta a este domingo, no hubo contemplaciones. Las dudas se despejaron pronto y la victoria sirviò para que el equipo aguantara la presión que marcan los de arriba, donde ninguno falló. El Vélez tampoco, puesto que su partido fue serio y muy contundente. Además dejó un detalle que ya se esperaba, el gol de Guerra, con el que se espera recupere el olfato de cara a lo que resta de liga.
Por eso en lo deportivo no podemos poner una sola pega. No la hubo. El Vélez supo qué debía hacer y lo cumplió a rajatabla. Apenas dos minutos tardó uno de los alumnos más aventajados, David Moreno, en abrir la lata visitante. Golazo y envite encaminado por un joven jugador granadino que volvería a ver puerta al final del choque.
Antes, el Vélez tuvo tiempo de gustarse en el Vivar Téllez. Apenas dio opciones a su rival y jugó con el mando del partido en todo momento. Gozó de buenas ocasiones y volvió a levantar de sus asientos al respetable con el dos a cero. Emilio Guerra fue el encargado de marcar en el ’14 un tanto que sentenciaba el partido.
Dos minutos después, una de las jugadas más innecesarias de los noventa minutos iba a dejar a los de Cazorla con uno menos. Y es que García Márquez iba a ver la amarilla en el ’16 (ya vio una antes, en el ‘6) y la posterior roja para desequilibrar el partido.
A partir de ahí, el Vélez mantuvo el dominio y bajó una marcha para llevar el partido a velocidad de crucero. Y las tuvo también ahí, aunque sin la suerte del inicio, dando por finiquitada una buena primera mitad.
De vuelta de la caseta, poca novedad para un partido que ya tenía un ganador. Y lo certificó el conjunto veleño en el ’89 con el segundo de David Moreno, tres a cero y los puntos que se quedaban en la capital de la Axarquía.
Ahora toca pensar en el Maracena y no perder comba con lo que se cuece en la zona alta de la tabla.
